martes, 8 de enero de 2013

Niños delincuentes


Niños delincuentes

Nacidos en el arroyo,
hijos de nadie,
hermanos de las ratas
y dueños de la calle.

Alumnos de la vida
en zonas marginales,
sucios y rotos,
las peleas, su lenguaje.

Niños delincuentes
maestros de supervivencia,
armas, sus juguetes
y su religión, la violencia.

Dejados de la mano
del amparo social,
carne de presidio,
embajadores del mal.

Mirada profunda,
desconfianza permanente,
entrenados para huir,
niños delincuentes.

Primero el tabaco, 
las drogas lo siguiente,
no conocen el sabor
de caramelos y pasteles.

Reconocen bien los palos
mas no saben qué es cariño,
maduros y endurecidos
en cuerpos de niño.

No reproches a estos niños
su modo de vida,
si quieren sobrevivir
no tienen otra salida.

No compares a estos niños
con los niños de tu casa,
en las mismas condiciones
tus hijos serían ratas.

Ahora mírate al espejo
y piensa en estos chavales,
ves su rostro y su entorno
y ves que no son culpables.

Mira a tus hijos, sus sueños,
durmiendo en camas calientes,
si les quitas cuanto tienen
también serían delincuentes.

A la vuelta del tiempo
los niños se hacen mayores
y lo que hoy es delincuencia
mañana serán horrores.

Ladrones, asesinos,
terroristas, violadores,
devuelen a la sociedad
su desprecio y sus rencores.

Autor: Manuel Lijó Moares

1 comentario:

  1. El autor de ese poema no es tan bueno como quiere aparentar...

    http://aflordepiel.wordpress.com/2008/08/16/urbe-manuel-lijo-moares/

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